miércoles, 9 de febrero de 2011

ACEITES PARA BENDICION Y PARA BENDECIR

Aceite para bendecir:

Se utiliza este aceite para bendecir el altar, candelabros, pebetero, herramientas o cualquier otro auxiliar de nuestros rituales.

Se mezclan dos partes de aceite de incienso con una parte de verbena y se le agregan dos partes más de aceite mineral si se desea hacer durar más. Agregar un pellizco de sal bendita.

Aceite para protección:

Se lleva como perfume y se unta en la frente, garganta, esternón, vientre, espalda (a la altura de la cintura y espina dorsal, manos y pies.

También se untan los conjuros o hechizos para protegerse del mal.

Se mezclan a partes iguales aceite de sándalo, pachulí, ruda o romero y gardenia. Se agregan de igual manera dos partes más de aceite mineral si se desea. Se agrega una pizca de sal bendita.

Bendiciones!

HECHIZO DE PURIFICACIÓN DEL ESPACIO SAGRADO

Materiales:

Una olla pequeña o un quemador de esencias
Agua bendecida
1 anís estrella
1 hoja de laurel
1 cucharadita de salvia
Una fuente de calor: quemador, bracero o unas velas de té
Incienso: mirra, copal, sándalo

De preferencia realizar este hechizo durante luna creciente a llena, día de la Luna o el Sol; hora de saturno o Marte.

Consagra la fuente de calor que hayas elegido pasándolo a través del humo del incienso y salpicándolo con agua bendecida. Di:

“Yo consagro este contenedor
para ayudarme en mi Arte.
Que el hecho que ahora tejo
quede sujeto y permanezca.”

Calienta agua de primavera en el bol sobre la vela de te o en la olla encima de un quemador. Cuando el agua esté caliente añade el anís estrellado y di:

“Permite que toda la negatividad rebote de este lugar.”

Añade la hoja de laurel y di:

“Como el aroma de esta hoja se mueve a través de este lugar,
pueda la purificación entrar en este espacio.”

Añade la salvia y di:

“A través de la salvia ahora manifiesto este hechizo,
que con paz y protección este espacio sea bendito.
¡Porque así lo deseo, así será!”

Deja que el aroma se mueva a través del área por unos momentos.

Bendiciones!

RITUAL DE CONSAGRACION DE HERRAMIENTAS RITUALES

Levanta el objeto, sostenlo en lo alto como saludo y di:

“Dios y Diosa; Señor y Señora;
Padre y Madre de Toda la Vida.
Aquí les presento mi herramienta personal
para su aprobación.

Con los materiales de la naturaleza ha sido moldeado;
Hecho en la forma que ahora ven.
Ojala que de ahora en adelante pueda servirme
como una herramienta y arma a mi servicio.”

Ponlo en el altar y levántate o arrodíllate por un momento con la cabeza inclinada, recordando la construcción del objeto, o su adquisición y/o lo que haz hecho para personalizarlo; lo que lo hizo realmente tuyo.

Moja entonces tus dedos en agua salada y salpica el objeto por todos lados. Levántalo y sostenlo en el humo del incienso, sahumándolo por todos lados. Di la siguiente oración:

“Pueda el Agua consagrada y el humo del Incienso Sagrado
expulsar cualquier impureza de este ______________,
que sea purificado y limpiado, listo para servirme a mi y
a mis Dioses en cualquier tarea que desee.
Que así sea.”

Sosténlo entre las palmas de tus manos y concentra todo tu poder en el objeto, mientras dices:

“Yo cargo este ______________, a través de mi
con la sabiduría y el poder del Dios y la Diosa.
Que pueda servirme bien, guardándome del daño
y actuando en su servicio en todas las cosas.
Que así sea.”

Si vaz a consagrar más de una cosa en el mismo ritual, repite todos los pasos por cada herramienta, cada uno por turnos.

Abre el círculo de la siguiente manera: alza de nuevo tus herramientas consagradas con tu mano de poder y di:

“Gracias Dioses por su asistencia.
Puedan siempre vigilarme desde arriba,
Guardándome y guiándome en todo lo que hago.
El amor es la Ley y el amor es el vínculo.

Y tanto arriba como abajo,
por mi fuerza y mi derecho
este hechizo ya está hecho.”

Lleva el objeto consagrado contigo, a dondequiera que vayas, durante las siguientes veinticuatro horas a la consagración. Después de esto duerme con él bajo tu almohada por tres noches consecutivas.

Bendiciones!

LIMPIEZA DE HERRAMIENTAS

Hay varias maneras de limpiar una herramienta antes de su primer uso. Los métodos de limpieza más comunes son:

Ponerla en una cama de sal de roca o arena de mar durante tres días.
Dejarla serenar toda la noche a la luz de la Luna llena, o mejor aún, a la luz de cada fase de la luna.
Lavarla con agua pura de manantial o agua mezclada con sal de roca.
Enterrarla en la tierra durante tres días.
Pasarla a través de incienso; tradicionalmente una pluma se usa para ventilar el humo sobre la herramienta; por ejemplo, el incienso de sándalo, mirra o copal es recomendado para estas actividades.
El método más apropiado depende del material del que está hecha la herramienta; por ejemplo, evita usar sal o agua para objetos metálicos; las herramientas de madera también pueden dañarse con la sal o con el agua si no están recubiertos con alguna resina o sellador.
Bendiciones!