En un día lunes o viernes, procederemos a llenar la bañera con agua caliente en la que habremos introducido lo siguiente:
Una concha marina de tamaño mediano
Las flores de cinco claveles blancos
Un puñado de sal gorda
Quince gotas de esencia de patchuly.
Lo removeremos bien y nos introduciremos en ella con la única luz que la que desprendan dos velas azul claro.
A los cinco minutos, sin vaciar la bañera, procederemos a darnos una ducha rápida deteniéndonos y enfocando el chorro a la nuca con el agua lo más caliente que podamos y alternándolo con otro chorro esta vez de agua fría en la zona de la pelvis.
La alternancia la efectuaremos un mínimo de tres veces.
Bendiciones!
Una concha marina de tamaño mediano
Las flores de cinco claveles blancos
Un puñado de sal gorda
Quince gotas de esencia de patchuly.
Lo removeremos bien y nos introduciremos en ella con la única luz que la que desprendan dos velas azul claro.
A los cinco minutos, sin vaciar la bañera, procederemos a darnos una ducha rápida deteniéndonos y enfocando el chorro a la nuca con el agua lo más caliente que podamos y alternándolo con otro chorro esta vez de agua fría en la zona de la pelvis.
La alternancia la efectuaremos un mínimo de tres veces.
Bendiciones!
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